Ya sea porque te has mudado a una nueva casa y quieres asegurarte de que no haya llaves duplicadas, o simplemente porque deseas mejorar la seguridad de tu hogar, cambiar una cerradura es una excelente manera de hacerlo sin tener que recurrir a un cerrajero profesional. Si te has planteado la idea de cambiar tu cerradura por tu cuenta, no te preocupes. En lugar de pagar por la intervención de un cerrajero, aprenderás cómo hacerlo tú mismo de forma rápida, segura y económica.

Aunque hay muchas variedades de cerraduras, desde las más simples hasta las de alta seguridad, el procedimiento básico es muy similar para todas. En este artículo, te guiaremos paso a paso para cambiar una cerradura, tanto si se trata de una puerta exterior común como de una puerta de seguridad. No es necesario ser un experto en bricolaje para completar este proyecto, solo seguir algunos consejos clave y tener a mano las herramientas necesarias. ¡Toma nota de estos sencillos pasos y mejora la seguridad de tu hogar!

Hay que conocer el tipo de cerradura con la que estamos tratando

Ya sabemos que estás entusiasmado, pero antes de lanzarte a cambiar una cerradura sin llamar a un cerrajero, es fundamental conocer qué tipo de cerradura estás manejando. Existen diferentes modelos en el mercado, y cada uno tiene sus particularidades, lo que puede influir en el proceso de instalación. Además, elegir el tipo adecuado depende de varios factores, como el nivel de seguridad que necesites y el tipo de puerta en la que vayas a trabajar. Entre las opciones más comunes encontramos:

  • Cerraduras de sobreponer: Se instalan en la parte interior de la puerta y quedan a la vista. Son ideales para puertas de hasta 4 cm de grosor y su instalación es sencilla, por lo que son una buena opción si buscas cambiar una cerradura sin llamar a un cerrajero.
  • Cerraduras embutidas: También llamadas empotradas, son las más utilizadas en la actualidad. Se integran dentro de la puerta, con una manivela en el interior y una llave en el exterior para abrir.
  • Cerraduras antibumping: Diseñadas para resistir intentos de apertura con la técnica del bumping, son una de las opciones más seguras del mercado.
  • Cerraduras multipunto: Se encuentran en puertas blindadas y acorazadas. Cuentan con varios puntos de cierre que se activan simultáneamente al girar la llave, ofreciendo mayor protección.
  • Cerraduras pomo: Comunes en puertas interiores, su mecanismo ha mejorado con el tiempo, aunque siguen siendo menos seguras que otros modelos.
  • Cerrojos de seguridad: Son elementos adicionales que refuerzan la seguridad de la puerta sin necesidad de cambiar la cerradura principal.
  • Cerraduras digitales: Utilizan tecnología avanzada para el acceso, como tarjetas, códigos, mandos o huellas digitales, y son comunes en hoteles y garajes.

El primer paso es quitar la platina interior y el embellecedor

El primer paso para cambiar una cerradura sin llamar a un cerrajero es quitar la platina interior y el embellecedor. Comienza por situarte dentro de casa y localiza la pieza decorativa que cubre la pletina interior. Esta debe ser retirada antes de seguir con el proceso. Asegúrate de que la distancia entre los tornillos de la pletina antigua coincida con la nueva cerradura. Si es así, afloja los tornillos y libera el escudo que está en la parte exterior de la puerta. Recuerda sujetarlo con la otra mano para evitar que se caiga.

Luego, quita el embellecedor interior, lo cual solo requiere soltar los cuatro tornillos. Con esta parte retirada, tendrás acceso al manillar y al cuadradillo que lo conecta con la cerradura. Una vez desinstalado el manillar, coloca la llave en el cilindro o bombín y afloja el tornillo del bombín en el lateral de la puerta. Si la cerradura tiene escudo, también necesitarás desatornillar la pletina interior para liberarlo.

Con la llave girada, empuja el bombín hacia afuera hasta que se libere por completo. Este paso es crucial para poder reemplazar el antiguo bombín por el nuevo. Asegúrate de que el diámetro del orificio y la pletina nueva coincidan con la nueva cerradura antes de continuar con la instalación. Con este sencillo procedimiento, podrás cambiar una cerradura sin llamar a un cerrajero, ahorrando tiempo y dinero.

Instala la nueva cerradura en el espacio vacío

Una vez que hayas retirado la cerradura antigua, el siguiente paso para cambiar una cerradura sin llamar a un cerrajero es instalar la nueva en el espacio vacío. Comienza colocando el nuevo bombín o cilindro en el mismo lugar donde estaba el antiguo. Asegúrate de que la ranura del cilindro se alinee perfectamente con el agujero de la llave en la puerta. Esto es esencial para que funcione correctamente.

Inserta la llave en el bombín nuevo y gírala para alinear la leva. Esto te permitirá colocar el cilindro en el orificio de la puerta de manera adecuada. Asegúrate de que sobresalga por el otro lado de la puerta y comprueba que la llave gire con fluidez, abriendo y cerrando la cerradura correctamente por ambos lados. Este paso es clave para asegurarte de que el mecanismo funcione correctamente una vez instalado. Después, coloca el tornillo que sujeta el cilindro en el lateral de la puerta y procede a montar la manilla junto con su cuadradillo. Finalmente, vuelve a colocar el embellecedor que habías retirado.

Coloca el escudo de seguridad y prueba la cerradura nueva

Por último, debes colocar el escudo de seguridad. Este escudo no solo protege el cilindro, sino que también mejora la seguridad de la puerta. Para ello, sigue las instrucciones del fabricante, ya que el montaje puede variar dependiendo del modelo. Coloca el escudo ya ensamblado en el orificio de la puerta, ajusta la pletina en el interior y fija todo con los tornillos pasantes.

Con el escudo de seguridad en su lugar, es momento de probar la cerradura nueva. Cierra la puerta y asegúrate de que la llave gire con facilidad y el pestillo se deslice sin problemas. Este paso es esencial para verificar que todo funciona correctamente. Si todo va bien, coloca la pieza decorativa que habías retirado al principio para finalizar el proceso. Ahora la parte más divertida, realizar una comprobación a puerta cerrada. Si tienes a alguien dentro del domicilio, pídele que te avise si algo no funciona correctamente. De esta forma, podrás hacer ajustes sin problemas. Con estos pasos, habrás logrado cambiar una cerradura sin llamar a un cerrajero ¡Felicidades!